Coautores: Giles Shih, director general de BRI y Karen Albritton, socia de Thinc Strategy.
Todos hemos pasado por lo mismo en algún momento en el último año: trabajando en un proyecto, mirando la pantalla, nos fijamos en la hora y han pasado 4, 5 y 6 horas, y no sabemos por qué el día se ha ido tan de prisa. Si bien hemos pasado la página en 2020 y esperamos con ansias el 2021, algunos de nosotros seguimos ajustándonos al equilibrio entre el trabajo y la vida privada en estos tiempos de pandemia y nos preguntamos qué podemos hacer para evitar el agotamiento.
Sabemos lo importante que es alentar a los miembros de nuestro equipo que trabajan arduamente a ser productivos y a mantener un equilibrio saludable. Aquí hay algunas ideas y acciones que hemos implementado para garantizar el bienestar de todo nuestro equipo.
1 – Animar a las personas a usar el tiempo de vacaciones y tomar una licencia por enfermedad
Muchos planes de vacaciones han sido cancelados debido a restricciones de viaje. Eso puede ser difícil a nivel mental para las personas. Sabemos que la gente tiene dificultades al tratar de vacacionar en su propia casa. Sin embargo, es vital desconectarse. Es natural sentir que tomar tiempo libre disminuye la productividad, pero según la ciencia (¡y confiamos en la ciencia!) ese no es el caso. Tomar descansos en realidad hace que una persona sea más productiva; y de acuerdo con la investigación realizada en la Universidad de California, las vacaciones ayudan a reducir los niveles de estrés y a mejorar el sistema inmunológico. ¿Quién no quiere un lugar de trabajo más productivo, más saludable y con menos estrés?
No haga que la gente se sienta culpable por necesitar un descanso. Proporcionamos un generoso paquete de vacaciones y animamos a todos los miembros del equipo a usarlas. Además, ¡esperamos que las personas en período de vacaciones también se tomen un descanso de sus correos electrónicos y mensajes de texto mientras están fuera de la oficina!
2 – Hacer espacio para sus necesidades y las necesidades de quienes le rodean
Si bien algunos aspectos de nuestras vidas se han visto interrumpidos por las diversas regulaciones de la COVID-19, todos los altibajos de la vida aún continúan, y los miembros de nuestro equipo han experimentado nacimientos, muertes, niños que comienzan la universidad, niños que comienzan el preescolar, enfermedades, e incluso un matrimonio durante esta pandemia. Hemos tenido la intención de atender las necesidades de los miembros de nuestro equipo. Nuestro equipo ha creado un espacio para que las personas trabajen desde casa y luego hemos comprendido en momentos en que sus hijos (o mascotas) han interrumpido una reunión de Zoom. Al proporcionar máscaras, distanciamiento social y modificar los espacios de trabajo, nos aseguramos de que las personas se sientan seguras cuando necesitan estar en la oficina. Cabe señalar que, si bien todos estamos resistiendo la misma tormenta en esta pandemia, la estamos resistiendo en diferentes embarcaciones con diferentes tipos de desafíos y reacciones. Hacemos todo lo posible para tratar a las personas como individuos y encontrarnos con ellas donde estén.
3 – Desarrollar la resiliencia en distanciamiento social
Creemos en el espíritu de aprendizaje a lo largo de toda la vida. Esta pandemia global nos ha enseñado mucho. Hemos aprendido a ser más productivos con el uso de la tecnología; hemos aprendido a pensar un poco más en la seguridad de los demás; hemos aprendido a lidiar con diferentes situaciones de una manera nueva y hemos aprendido a liderar con nuestras cabezas y nuestros corazones de manera diferente.
Recientemente, nuestro director general inició una reunión de Zoom con el concepto de «Tres cosas buenas» y alentó a cada miembro a reflexionar sobre algo bueno en su vida. Resulta que los investigadores de ciencias sociales en la Universidad de Duke y en otros lugares descubrieron que tomar tiempo para reconocer las cosas buenas en nuestras propias vidas ha demostrado aumentar la resistencia al agotamiento emocional en varios entornos de trabajo. El trabajo fue tan impactante que los expertos de la Universidad de Duke desarrollaron herramientas en línea gratuitas para ayudar a los trabajadores de la salud de primera línea a desarrollar resiliencia para lidiar con las situaciones estresantes que enfrentan en su trabajo diario.
La fatiga por la COVID es real y también lo es el agotamiento que viene con ella. Por ello, alentamos a nuestro equipo a hacer todo lo posible para desarrollar la resiliencia dentro de sí mismos y con sus colegas. Así que, aunque todavía tendremos días en los que vamos a mirar hacia arriba para preguntarnos cómo ha pasado tan rápido el tiempo, esperamos que esas sean horas más productivas, saludables y felices.